Maladruà, con Estel Boada y Xavier Michel

“Maladruà” es “maladroit”. Quiere decir “torpe” en francés. Sin embargo, la interpretación de lenguas y códigos de diferentes regiones siempre juega un papel torpe a la hora de establecer conexiones inmediatas.

Estel Boada (Cataluña), cantante y artista multidisciplinar, conjuntamente con Xavier Michel (Francia), performer poético del absurdo, nos introducirán en el universo de André du Colombier a través de una mirada llena de humor, juegos lingüísticos y experimentación con el espacio.

Esta propuesta forma parte del programa RELÉ de las jornadas ARTefACTe5, un proyecto de CLUB9 para el fomento de la performance francesa contemporánea. Cuenta con el apoyo del Espai nyamnyam.

Xavier Michel (Poitiers, 1990) tiene un título en Ingeniería de Sistemas y un grado en Bellas Artes por la Villa Arson de Niza. Desde hace varios años ha desarrollado un trabajo performativo en el que manipula esculturas-herramienta en puestas en escena absurdas y poéticas. Su práctica se nutre del teatro de objetos, del circo, de la danza y de la música, dando lugar a un lenguaje polisémico y sensible. En los últimos meses trabaja en Barcelona, ​​donde su obra encuentra resonancias y cierta afinidad con la escena artística local. Actualmente, realiza una residencia en Hangar-org.

Estel Boada (Barcelona, ​​1991), cantante y artista multidisciplinar, se define como una juglaresa contextual. Con formación en Bellas Artes, explora el espacio, la colectividad y la voz a través de la performance. Su trabajo, marcado por el humor y el absurdo con toques de fantasía, reflexiona de forma burlesca sobre su vida como “diva frustrada”. Interesada en la educación experimental, el arte contextual, el sonido, la música y el dibujo, utiliza la acción y el humor como herramientas de crítica. Ha participado en numerosas intervenciones de arte interdisciplinar y comisariado ciclos de arte contemporáneo autogestionados. También es compositora y vocalista de distintos proyectos musicales.

André du Colombier. Un punto de vista lírico. Vista de la exposición. Foto: Eva Guillamet